26 JUNIO
EMISIÓN DE UN VÍDEO.
El pasado 7 de mayo, ANDALUCÍA DIRECTO emitió unas imágenes sacadas de un vídeo grabado desde un teléfono móvil. Se trataba de una noticia sobre "la paliza" que varios compañeros había propinado a una menor en LINARES (JAÉN). Los que la habían golpeado, además, habían grabado en vídeo desde un teléfono móvil la mencionada paliza. ANDALUCÍA DIRECTO emitió las imágenes de ese vídeo como ilustración a la información que se hizo. Consta que se emitió también en otros espacios informativos, lo que ha motivado la queja de un espectador y la intervención, por cuenta propia, del Consejo Andaluz de Asuntos de Menores (dependiente de la Consejería para la Igualdad de la Junta de Andalucía). El Defensor ha visto las imágenes y la noticia y ha solicitado información sobre el asunto al editor de ANDALUCÍA DIRECTO, quien indica: "el asunto, desde luego, es peliagudo y las imágenes, duras. En efecto, era una agresión a una niña de catorce años por parte de otra, mientras algunos amigos grababan y se reían. La agresión fue denunciada por sus padres y los responsables fueron detenidos y están pendientes de juicio. Los padres de la agredida, voluntariamente y asesorados por su abogado, quisieron hacer declaraciones a cámara, conscientes, por tanto, de que su hija podría ser identificada. En la grabación realizada con un teléfono móvil, y que nosotros emitimos, no es posible identificar a agresora y agredida. Primero porque la calidad de la imagen no lo permite y porque, además, digitalizamos las caras de ambas. La secuencia es dura por lo que se ve y por las risas y comentarios que se oyen, pero no lo es más que otras secuencias similares que en otras ocasiones se han emitido en CSTV. ANDALUCÍA DIRECTO no intentó hacer un espectáculo de esas imágenes. Se emitieron subrayando las consecuencias que un acto así conlleva: es decir, que eso no es un juego y que los implicados fueron detenidos y serán juzgados. Es lógica la preocupación que la emisión de imágenes así provoca. Sinceramente, no creo que sean peores que otras muchas que a diario se emiten. Puede decirse que la difusión de esas imágenes es precisamente lo que pretenden quienes hacen cosas como esa y que, por tanto, emitirlas es invitar a otros a hacer lo mismo. También puede decirse que contar en televisión que hacer algo así puede llevarte a la cárcel es una advertencia para quienes lo hacen. Y puede decirse que la emisión de las imágenes sirve, también, para poner en alerta a los padres de lo que pueden estar haciendo sus hijos". El editor del programa admite la crítica y dice asumir la decisión de emitir las imágenes que, "en todo caso, está en el límite de lo razonable". Por su parte el Consejo Andaluz de Asuntos de Menores (dependiente de la Consejería para la Igualdad y el Bienestar Social de la Junta de Andalucía) entiende que es "lamentable la emisión de la paliza de una menor por parte de otra, con la colaboración e inducción de terceras personas, que graban el hecho con un teléfono móvil". Y añade: "se considera lastimoso que estas cosas ocurran, pero aún más penoso que sea precisamente la televisión pública la que haga de amplificador y escaparate del hecho. Resulta especialmente reprobable que un medio de comunicación social, en este caso la Televisión pública de Andalucía, en abuso de la libertad de información, transmita, repitiéndolo hasta tres veces en un corto espacio de tiempo, la brutal agresión que sufre una niña, para escarnio de la víctima, popularidad de la agresora y su o sus cómplices y vergüenza de una sociedad que mira y traga todo lo que le introducen en su casa sin reproche o rechazo alguno. Una cosa es dar la noticia e ilustrarla con un fotograma, por ejemplo, pero otra bien diferente es regodearse en el episodio, mostrándolo con toda su extensión y crudeza y repitiéndolo "ad nauseam". Suponiendo que a quien decidió emitirlo le moviera la buena intención, pensando, tal vez, que al verlo se aprenderá qué es lo que no se debe hacer, la investigación tiene más que documentado que la contemplación de este tipo de escenas actúa de acicate para las personalidades agresivas, que encuentran un modelo de comportamiento y la promesa de, encima, convertirse en noticia televisiva. De emitirse el vídeo, por lo que de movimiento de repulsa y concienciación pueda teóricamente suponer, debería haberse efectuado de una manera más pedagógica y subrayando más el carácter perverso de la situación, incluso invitando a reflexionar por qué nuestros adolescentes llegan a esto, etc., pero nunca emitiendo la agresión y menos en tres ocasiones. Seguramente en el centro escolar al que la niña asiste ha habido reacciones positivas por parte de profesorado y alumnado. Se podía haber explorado cómo se hace una denuncia en situaciones como ésta y cuál es la respuesta de protección que se da. Terminar la noticia con la coletilla "... está en manos de la fiscalía... tendrán que responder..." no es, en absoluto, suficiente. Se concluye que con la emisión de videos como el que ha sido sometido a la consideración del Consejo, la televisión pública andaluza está muy lejos de cumplir sus funciones sociales, mereciendo por tanto su reprobación".
NOTA DEL DEFENSOR.- Conforme a la Disposición del Consejo de Administración de la RTVA que regula las funciones del Defensor del Oyente y del Espectador en CSR y CSTV, no se admiten quejas, sugerencias ni opiniones anónimas. Si se llama al contestador es necesario especificar el nombre y el teléfono o dirección del comunicante.
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